sábado, 26 de septiembre de 2015


EL DIA EN QUE LA LUZ Y LA OBSCURIDAD SE ENCONTRARON

Érase una vez dos estrellas desoladas en la obscuridad, estas se desplazaban tan rápidamente y sin dirección alguna que chocaron, en este gran impacto se unieron creando una gran esfera.
En unos segundos, uno de los cráteres  de esta esfera  comenzó a brillar y  empezó a notarse una figura, al alejarse casi completamente de la luz, se distinguía una mujer de cabello largo, blanco y ondulado, de tez grisácea vestida únicamente con un vestido rosado.
Pasado los años, ella iba modificando el planeta o por lo menos la parte que se lo permitía,  ya que había una mitad que era tan obscura que no permitía la entrada de su luz, al darse cuenta de que no podía iluminar y modificar la otra mitad, decidió ir a investigar. Al apenas pisar la parte tenebrosa, se debilitó repentinamente y por cada paso que daba su cuerpo respondía menos, varios pasos luego de haber entrado se había debilitado tanto que no pudo resistir más y su cuerpo empezó a caer al suelo, pero antes de que lo tocara sintió que algo, o más bien alguien interrumpió su caída. Al mirar de qué se trataba vio un hombre de tez obscura, cabello lacio y ojos grises vestido con unas telas que dejaban ver cierta parte de su anatomía. , quien la estaba sosteniendo a centímetros del piso.
Él, la levantó en sus brazos y la llevo a la mitad de la esfera donde había una zona que unía la luz y la obscuridad. Allí la dejo en el suelo y se sentó frente a ella, esta le sonrió.
Hombre: ¿quién eres?
Mujer: no tengo nombre.
Hombre: Lux- pronunció él de la nada y sin pensamiento alguno.
Lux: pues ese será mi nombre, ¿Cuál es el tuyo?- respondió inmediatamente.
Hombre: pues al igual que tú, todavía no tengo uno.
Lux: Tenebris.-dijo ella- es lo primero que se me ocurrió cuando visité el lado más oscuro de mi estrella
Lux y Tenebris se unieron para terminar de modificar el mundo, creando, césped y árboles de diferentes tamaños y colores,  dándole diferentes formas y texturas a las rocas de  su planeta. Se dieron cuenta de que aunque estuviesen juntos se sentían solos y comenzaron a crear criaturas; pero mientras que Lux las creaba tiernas e inofensivas, Tenebris también dejaba volar su imaginación creando criaturas desagradables y hostiles.
Lux aún se sentía desolada y mientras más tiempo pasaba, más se alejaba de su acompañante. Decidió crear alguien semejante a ella con quien pudiera hablar. Comenzó a moldearla con rocas césped y sangre de diversas criaturas que antes creó. Moldeó una silueta similar a ella; al verla comenzaron a platicar y mientras más hablaba con la mujer, ella más conocimiento le daba. Le puso un nombre Inmanity; se volvieron tan inseparables que Tenebris comenzó a sentir celos y odio hacia esta nueva creación de su amiga quien tenía cabello largo negro con algunas ondas y ojos marrones. Vestida con vestimentas simples pero que cubrían su cuerpo.
Tenebris tomo la decisión de destruir a la nueva creación de su amiga, por lo tanto fue hasta la luz y débilmente lanzó una gran nube negra por sus manos y ataco a Inmanity, pero al ser débil el ataque no destruyó la muchacha, sino que la dividió en dos personas distintas, ahora eran ella y un hombre con cualidades similares.
Lux rápidamente se acercó a su creación y comenzó a sacudirla de un lado a otro desesperadamente, su creación ya no era la misma sus capacidades intelectuales disminuyeron y no lograba comprender mucho. Lux enfurecida miró por última vez a su antes fiel acompañante y  comenzó a flotar desplazándose hacia la obscuridad de donde había salido su antes preciada estrella,  tomando su lugar e iluminando la mayor parte del planeta, Tenebris imito la acción de su amiga y  se elevó hacia el lado paralelo del planeta reflejando obscuridad en la otra mitad del planeta. Los Inmanity vivieron en el planeta pero su nombre fue cambiado a humanos, no pudieron modificar su planeta como antes ya que son la mitad de lo que solía ser un semidiós, por lo tanto perdieron sus poderes.
Un día, Lux, su creadora, como entrega de su amistad hacia Tenebris le regaló un rayo de luz en forma de esfera, el cual le recordara eternamente su antigua amistad y su traición hacia ella. Tenebris quien cambio su nombre a Luna por la humillación que sentía,  lo recibió como ofrenda de paz  y recordatorio de sus celos.
Los humanos reinaron en el planeta al que llamaron Planeta Tierra y hacían ofrendas y fiestas a su creadora, y antes amiga Lux o como se hacía llamar, Sol.

Arambides, Mariana   y Cárdenas, Solciré         4°1ª ARTES VISUALES
Esc 759                                                               ciclo 2015


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